Entrevista a Osvaldo Vellón
El mercado de la invernada está signado por la escasa oferta y eso hizo que esta temporada se anticipara la suba que habitualmente comienza a darse en septiembre.
Este año hubo menos terneros en venta y eso se evidencia más ahora, porque ya se termina la zafra.
Esa escasez afirmó los precios, porque del lado de la demanda es muy poca la capacidad de respuesta.
Los feedlots pierden plata con esta relación de compra-venta. El gordo lo negocian a 2.000/2.200 pesos y el ternero vale entre 10% y 20% más. Pierden plata. Y además no esperan un repunte en los valores del gordo en los próximos meses, porque hay mucho en los corrales y porque el consumo interno no mejoraría su poder de pago de la carne.
POCA OFERTA Y MEJORA EN PRECIOS