En los primeros meses de 2024, las importaciones de carnes bovinas se han mantenido estables, aunque se observa una caída de Estados Unidos, que fue compensada por el resto de los proveedores. La firma del Acuerdo Transpacífico ha beneficiado a Australia y Nueva Zelanda, que desde el 1ro. de enero de 2023 ingresan sin abonar aranceles.