¿En qué momento del ciclo nos encontramos?
La faena en la primera mitad del año cedió significativamente, pero en los últimos meses del 2024 se recuperó, ubicándose entre agosto y noviembre al mismo nivel que el año anterior, que fue un año de caída del stock ganadero. Si se proyecta la evolución de las existencias ganaderas al 31 de diciembre próximo, se calcula que habrá una sensible recuperación en el número de terneros (entre 400 y 500 mil crías), pero se registraría otra caída en el stock de vacas y de vaquillonas, categoría cuya faena en el segundo semestre del 2024 se ubica bien por encima de los niveles de equilibrio. La recuperación en el número de terneros podría llevar a un destete de 15,1 millones de crías para el otoño próximo, en franca recuperación pero todavía por debajo de los 15,2-15,4 millones de terneros logrados en los años 2006, 2007, 2008, 2018, 2019, 2022 y 2023. La cantidad de terneros destetados marca en gran medida el potencial de producción de carne de nuestra ganadería. En función del excelente estado de la vacas y de los campos de cría en la actual primavera, se espera una importante recuperación del destete en el 2026.
Al 31 de diciembre, entonces, se encontraría un mayor número de terneros y un menor número de vacas y vaquillonas, resultando un stock total muy parecido al de diciembre del 2023, que fue de 52,7 millones de cabezas. A fines del 2024 la fase de retención del ciclo ganadero sigue sin aparecer: la participación de las hembras en la faena, indicador “avanzado” confiable, se ubicaría en el 48,5%, el tercer registro más alto para esta época del año de los últimos 25 años.
DE LAS DIFICULTADES