Los precios de la hacienda bovina han tenido una tendencia ascendente en los Estados Unidos, como consecuencia de la escasez de oferta y de una firme demanda. Ello se ha agudizado como consecuencia de la guerra comercial que encaró la Administración Trump, con la imposición de aranceles recíprocos.
La reciente "tregua" pactada con el gobierno chino, ha traído alivio a los productores, si bien la barrera comercial sigue siendo elevada para que las carnes bovinas estadounidenses accedan al mercado chino (32 por ciento).
Paralelamente, esta evolución alcista se vio reforzada por la decisión de cerrar la frontera con México, ante la confirmación de nuevos brotes del gusano barrenador, que por otro lado, se confirmaron cercanos al territorio de Estados Unidos, lo que disparó la prohibición, que recientemente se había evitado con la concesión por parte de México de mayores garantías para las exportaciones.
La medida rige por quince días y será revisada "mes a mes", extendiendose a ganado bovino, caballos y visones.
México es un importante abastecedor de hacienda para los feedlots de Estados Unidos, lo que explica el impacto de cortar esta corriente en el mercado de hacienda: los valores del ganado bovino han registrado un nuevo incremento, y, en el caso del novillo para faena, su precio llegó a un máximo histórico con 5 US$/kg vivo.
Fuente. Informe Ganadero a partir de datos USDA, Drovers Journal.