Speckle Park, la raza que viene a sumar en diferentes terrenos
La raza Speckle Park fue creada en 1959 en Canadá con genética británica, en la década del 80 se creó la Asociación de criadores en ese país y fue reconocida como raza en la década del 90. Al comprobarse sus virtudes, en poco tiempo la expansión de la raza fue vertiginosa en Estados Unidos, Australia, Brasil, Nueva Zelanda, Irlanda e Inglaterra, donde ha ganado popularidad.
Sus vacas son bien moderadas, costilludas y funcionales. Tienen un tipo británico, justo como el que busca hoy la Argentina: moderación (frame 4,5-5), arco de costilla, clase, buena calidad de carne, marmoleo terneza, estos últimos medidos en Australia, que es el país que más mide todo en ganadería y que manejan una gran eficiencia productiva.
El pelaje va desde negro hasta blanco, pasando por los intermedios, con muy buena pigmentación en los ojos, hocico y patas. Se adapta tanto al frío como al calor.
Además de por su bajo peso al nacer, los animales se destacan por su tamaño intermedio, bien profundos, muy carniceros, de gran fertilidad y precocidad sexual y mansedumbre.
La raza se destaca por su alta eficiencia de conversión de alimentos y una impresionante capacidad de adaptación. Tiene la particularidad de soportar climas extremos desde 30º bajo cero hasta temperaturas mayores a 40º C , y dentro de ambos extremos producen en forma eficiente.
Frente al sorprendente crecimiento que experimenta en los países ganaderos, en 2021 se trajeron al país 60 embriones de tres vacas seleccionadas de Canadá; numerosos ganaderos apoyaron este proyecto y en julio pasado se fundó la Asociación Argentina de Criadores de Speckle Park, que preside Carlos Ojea Rullan. Próximamente ingresarán unos 240 embriones más, para que los ganaderos interesados inicien la crianza de esta raza.
El notable interés ya despertado por esta raza en nuestro país quedó reflejado en la edición del remate Genética de Elite, en el que el precio máximo para todos los embriones subastados de las ocho razas presentes correspondió a un lote de embriones de Speckle Park que alcanzó los $5,5 millones cada uno.