Una oferta ganadera decreciente, una exportación empoderada por la devaluación y la libertad comercial, y un consumo que se resiste a bajar de los 50 kg per cápita equivalente anual, determinan que en un contexto económico muy difícil el precio de la hacienda haya acompañado la “super-inflación”.
Para ver todo el contenido completo debes comprar la: SUSCRIPCIÓN ANUAL.